Elementos comunes
Yonnier Torres
El agua mancha la ciudad. La gente cruza la calle con bolsas de nylon atadas a la cabeza…
Danay es un espejo detrás del escenario
Racso Morejón
Textos inéditos del poeta y promotor cultural Racso Morejón (La Habana, 1965)…
Escribir con voz del llanto
Leopoldo Luis
Asistí a la presentación de Dichosos los que lloran en el patio del Instituto Cubano del Libro…
La parodia lúdica. Un complejo modo de sonreír
Ernesto Peña González
Capítulo del ensayo inédito Formas humorísticas de la Literatura Cubana.
Tenía la carta en la mano
Víctor Hugo Pérez Gallo
Tenía la carta en la mano, para protegerla de la humedad. Había estado lloviendo todo el día. Mañana sería 7 de diciembre de 1896, día en que el Mayor General Antonio Maceo y Grajales y su ayudante de campo e hijo del Generalísimo Máximo Gómez Báez, el capitán Panchito Gómez Toro, debían morir ambos en una escaramuza sin importancia, traicionados por uno de los muchos agentes a sueldo que los norteamericanos tenían entre sus tropas...
Hierve la sangre
Rafael Grillo
“Qué hermosa”, piensa, con los ojos henchidos por los destellos de plata, sus dedos acariciando la curva de luna mahometana. Delgada en el nacimiento junto a los gavilanes en forma de S y ensanchándose en el recodo hacia la punta...
Entrevista a Rafael Grillo
La narrativa cubana en el siglo XXI
Félix García Acosta (Felo)
Bajo este título, el autor ha publicado una serie de entrevistas con narradores cubanos en el semanario capitalino Tribuna de La Habana. Reproducimos en Isliada.org el texto íntegro de la presente.
Té con Emerio junto a la Villena
Leopoldo Luis
De una lectura de cuentos y sobre Café bajo sombrillas junto al Sena en la sala Villena de la UNEAC...
Los naipes marcados del destino
Yoss
El 25 de octubre de 1415, a inicios de la segunda etapa de la Guerra de los Cien Años, tuvo lugar la batalla de Agincourt...
Semana Negra de Isliada
Disles que no me maten
Lorenzo Lunar Cardedo
Es probable que usted no haya leído mi primera novela policiaca. La tirada fue apenas de dos mil ejemplares y eso, en un país donde todo el mundo sabe leer y escribir, es apenas una gota de agua en el mar; sobre todo si se tiene en cuenta que me gasté todo el dinero de mis derechos de autor en comprar la edición casi completa...
El martillo y la hoz
Emerio Medina
Comunistón, le dijo Fello. Por lo del martillo y la hoz colgados en la pared de la sala, cruzados como en la bandera, en simetría perfecta sobre el fondo azul opaco. Y a él no le importó que le dijeran comunista. Que se rieran, si querían, pero no iba a renunciar al placer de contemplarlos, no le importaba que le dijeran ruso, o comemierda, que para Fello era lo mismo, y para los otros también, los amigos de siempre...
La Habana entre elegante y obscena
Leopoldo Luis
“¿Acaso no pueden suceder una y mil cosas increíbles en La Habana?”. Si creyera alguien divisar en la Plaza de Armas a Teresa y Sab, a Quijote y Sancho, a la mismísima Cecilia Valdés o al negro Caniquí con uniforme azul de policía llegado de la región oriental, ¿se asombraría?...
Movimientos extremos
Leyla Leyva Lima
tranquila y en silencio una mira/ el modo de un coleóptero y sonríe/ con deseos de colgarse al capital/ hace un meneo de párpados registra/ el mundo secreto de las cosas/ en una contemplación pausada desde lo bajo/ abajo
Salvar al poeta Novás
Rafael Grillo
Hay ciertos actos humanos que poseen para nosotros eso que Jorge Luis Borges llamaría “encantos de lo patético”