Malleus Maleficarum

,

Malleus Maleficarum

Resumen del libro: "Malleus Maleficarum" de ,

El más famoso de todas los libros sobre brujería, fue escrito en 1486 por dos monjes dominicos. En el acto, y a lo largo de los tres siglos siguientes, se convirtió en el manual indispensable y la autoridad final para la Inquisición, para todos los jueces, magistrados y sacerdotes, católicos y protestantes, en la lucha contra la brujería en Europa. Abarcaba los poderes y prácticas de los brujas, sus relaciones con el demonio, su descubrimiento, la Inquisición, la hoguera y la tortura, mental y física, de la cruzada contra la brujería: todo esto es conocido. Y detrás de cada uno de los actos sanguinarios se encontraba este libro, a la vez justificación y manual de instrucción.

Libro Impreso EPUB

JUSTIFICACIÓN

Las editoriales están lanzando al mercado en los últimos tiempos bastantes trabajos, desiguales en sus pretensiones científicas o validez testimonial, pero que están mostrando el interés que, hoy como ayer, despierta el universo de lo esotérico, de lo trascendente, y con una fuerza inusitada el de lo demoníaco.

Basta, sin más, constatar, junto a este fenómeno, el afán que hasta se podría motejar de morboso, con que son acogidas películas o manifestaciones de cualquier índole acerca de realidades sociales o psíquicas por largo tiempo olvidadas o marginadas, en las que determinados fenómenos, aparentemente reducidos a los estrechos límites de la explicación científica reclamasen de nuevo enfoques tenidos por acientíficos u obscurantistas hasta ahora.

Es posible que de ello se desprenda la evidencia de que nuestro mundo y sus gentes están buscando de una forma casi angustiada y, por supuesto, con interés que los destaca sobre el no decaído durante el inmediato pasado, horizontes nuevos y distintos ante el reto que les lanzan los peculiares problemas con que se enfrentan.

Las fórmulas de enfoque racional del mundo y de la vida parecen haberse agotado, después de haber quedado vigentes en nuestra cultura desde el Renacimiento. De forma progresivamente clara pugna por aparecer, dominando, lo irracional sobre todos los ámbitos de la cultura que intenta nacer. Este fenómeno nos está haciendo descubrir fórmulas culturales a las que nuestro engreimiento racionalista despreciaba, y todo un mundo se descubre al reconocer, por ejemplo, el aporte, que para la resolución de angustias y sinsentidos, supone la incorporación de elementos provenientes de las civilizaciones orientales. Es el buceo en el yo profundo a partir de expresiones culturales que nos han sido ajenas hasta el momento.

Paralelamente a ello surge potente un interés por lo trascendente, aunque, sin duda, este afán de más allá busque también caminos apartados de la herencia próxima.

Es probable que todo ello resulte síntoma inequívoco del agotamiento de principios, planteamientos, valores y juicios que han alimentado nuestro afán desde hace siglos.

En esta búsqueda a que nos lanza la insatisfacción experimentada, redescubrimos con gozo los hitos que han ido dejando quienes cultivaron vías que hoy emprendemos de nuevo como inéditas, y aspiramos al contacto con aquellos mundos que de forma despiadada e inevitable sacrificó el nuestro «Moderno», cuando nacía. En muchos aspectos intentamos recuperar eslabones y tiempos perdidos.

Ante todo este conjunto tan complejo de sentimientos y fenómenos presentamos hoy un rescate, capaz de ofrecer un doble mensaje. De un lado nos enfrentarnos con un libro escrito en una época crítica, como la nuestra, en la que el miedo necesitó echar mano de chivos expiatorios para sacrificarlos en el ara de un orden necesario que se desmoronaba, fenómeno al que se estaban sobreimponiendo calamidades naturales incontrolables. Posiblemente reconoceremos aspectos inmarcesibles de la crueldad humana alentada por la rigidez ordenancista cuando tras de ella es posible atisbar el ánimo de supervivencia para grupos muy cualificados, de fácil trasposición al presente.

Enrique Kramer. Fue un inquisidor, conocido por ser el autor del Malleus Maleficarum. Ingresó en la Orden Dominica de muy joven y en su juventud fue nombrado Prior del monasterio dominico de su ciudad natal. En algún momento anterior a 1474 fue nombrado inquisidor de Tirol, Salzburgo, Bohemia y Moravia.

Jakob Sprenger. El enigmático fraile dominico nacido en Rheinfelden en 1435, dejó una huella indeleble en la historia como el presunto coautor del Malleus maleficarum, un tratado medieval infame. A los 17 años, se sumergió en la Orden Dominicana en Basilea, desencadenando una trayectoria que lo llevó a ser prior del convento de Colonia entre 1472 y 1488.

Nombrado Inquisidor General de Alemania por el papa Sixto IV en 1475, Sprenger demostró ser un incansable viajero por vastos distritos al asumir el cargo de Inquisidor Extraordinario para Maguncia, Tréveris y Colonia. Aunque la obra maestra de su época, el Malleus maleficarum, le atribuye notoriedad, investigaciones recientes sugieren que su colaboración en este tratado fue exagerada, siendo Heinrich Kramer el verdadero autor.

La Apología, presunto prólogo escrito por Sprenger, también es cuestionada, siendo señalada como una falsificación por el secretario de Sprenger, Servatius Vanckel. A pesar de su papel en la lucha contra prácticas de magia, no parece que se dedicara a la caza de brujas como Kramer.

Además de su faceta inquisitorial, Sprenger fundó en 1474 la primera asociación de rosacrucianos en Colonia, convirtiéndose con el tiempo en la mayor de Alemania. Incluso personalidades como el emperador Federico III de Habsburgo y su hijo Maximiliano I llegaron a pertenecer a esta influyente asociación.

En la encrucijada entre la fama y la controversia, Jakob Sprenger emerge como una figura compleja, forjando su legado en los rincones oscuros de la historia medieval.