Poetas peruanos

Isaac Goldemberg

Isaac Goldemberg, tejedor de palabras y sueños, nació en el corazón de Chepén, Perú, en 1945. Entre viajes y vivencias, su pluma ha trazado el camino de la comunidad judía en tierras sudamericanas, llevando consigo la esencia de la vida y la cultura a través de la poesía, la narrativa y el teatro.

Percy Gibson Parra

Entre las brumas del tiempo, Percy Gibson Parra, poeta peruano del siglo XX, alzó su pluma como un canto al alma de su tierra. Heredero de una estirpe de poetas, sus versos surcaron mares y cielos, tejiendo historias de luz y sombra. Su legado, premiado y etéreo, sigue danzando en las letras del Perú.

Julio Garrido Malaver

Julio Garrido Malaver, voz de los desposeídos, plasmó en versos la lucha y el amor. Desterrado por ideales, encarcelado por sueños, su pluma fue espada y abrazo. Poeta del pueblo, político del corazón, su legado es un eco de justicia y esperanza en la historia de Perú.

Miguel W. Garaycochea

Miguel Wenceslao Garaycochea, poeta, político y matemático del siglo XIX, trazó su destino entre versos y números, desde los claustros de Arequipa hasta las altas esferas del Congreso. Su vida fue un baile de letras y cifras, tejiendo el tapiz de la historia con su pluma y su saber.

José Gálvez Barrenechea

José Gálvez Barrenechea, luminaria del siglo XX en Perú, fue más que un poeta: fue el eco de la historia, un susurro de la patria. Su pluma, imbuida de pasión y compromiso, trazó versos que entrelazaron el alma de Lima con el latido de su gente. Político, catedrático, su legado perdura en cada rincón del país, recordándonos que la poesía y la acción son dos caras de una misma moneda en el libro de la vida.

Hélard Fuentes Pastor

Hélard Fuentes Pastor, como un arqueólogo de las letras, exhuma las raíces de Arequipa en sus obras, donde la historia palpita en cada página. Con la pluma enraizada en su tierra, sus escritos son un viaje al pasado que ilumina el presente.

Mario Florián Díaz

Mario Florián Díaz, hijo de la tierra andina, cultivó versos como semillas en el campo de la poesía. Con raíces campesinas y un alma errante, sus palabras brotaron como ríos de sentimiento, reflejando la belleza y la lucha del hombre andino. Su legado es un canto a la naturaleza y la justicia, un faro de luz en la oscuridad del olvido.

Clodoaldo Espinosa Bravo

Clodoaldo Espinosa Bravo, poeta peruano de alma inquebrantable, tejió versos entre las sombras de la adversidad. Nacido en Huertas, Jauja, en 1900, su pluma surcó los horizontes de la esperanza, desafiando tragedias y dejando un legado imperecedero de belleza y coraje.

Jorge Eslava

Jorge Eslava, el poeta peruano nacido entre las brumas de San Miguel, Lima, tejió versos con las luces y sombras de su tierra. Desde las calles de Magdalena del Mar hasta las olas de La Punta, su pluma ha navegado por las profundidades del alma humana. Maestro de la palabra, sus escritos han iluminado la conciencia y el corazón, recibiendo reconocimientos que le elevan como faro de la literatura nacional.

Alberto Escobar

Alberto Escobar, luminaria de la poesía peruana, nació entre los susurros de Lima en 1929 y dejó su huella imperecedera en la literatura. Maestro en San Marcos, sus versos alzaron vuelo como las aves en la aurora, trazando un sendero de belleza y sabiduría hasta su partida en 2000.

Denisse Vega Farfán

Denisse Vega Farfán, poeta peruana de Trujillo, teje versos que despiertan almas y danzan con las estrellas. Con su pluma, navega los océanos de la emoción, llevando consigo la esencia de su tierra natal a cada rincón del mundo.

Serafín Delmar

Serafín Delmar, hijo de la montaña, tejió su vida entre las letras rebeldes y el compromiso ardiente. Desde Huancayo hasta Chile, su pluma fue viento de cambio, su voz, eco de justicia. Poeta de la lucha, su legado es un himno a la libertad en versos de fuego y pasión.

Washington Delgado

José Washington Delgado Tresierra, luminaria de la poesía peruana, tejió versos de profundo sentimiento y aguda reflexión. Nacido en Cuzco en 1927, su pluma atravesó la niebla del tiempo para iluminar la literatura con su inigualable talento. Miembro de la Generación del 50, su legado perdura como un faro de inspiración en el vasto océano de la palabra escrita.

Aníbal Víctor de la Torre

Aníbal Víctor de la Torre, poeta y diplomático peruano del siglo XIX, tejedor de versos y diplomacia, navegó entre la pluma y el deber patrio. Su vida, marcada por la pasión literaria y el servicio a la nación, dejó un legado imperecedero entre las letras y las gestas diplomáticas de América del Sur.

Fernando Cuya Palomino

Fernando Cuya Palomino, poeta nacido en la mágica Lima, Perú, en 1980, es un tejedor de palabras que enlaza el alma con la pluma. Su obra, impregnada de sensibilidad y profundidad, refleja la esencia de la poesía contemporánea peruana, explorando la belleza del mundo y el alma humana.

Manuel Nicolás Corpancho

Manuel Nicolás Corpancho, alma romántica de la literatura peruana, navegó los mares de la poesía y la diplomacia. Su vida, corta como un suspiro, brilló con la pasión de un poeta y la valentía de un navegante, dejando un legado inmortal en las letras del Perú.

Marco Antonio Corcuera

Marco Antonio Corcuera, el poeta peruano que tejía versos como hilos de luz entre las sombras del tiempo. Editor visionario, fundador de premios literarios, su pluma navegó por los mares del alma, dejando estelas de belleza y reflexión. Su legado perdura, un faro en la noche de la poesía.

José María Corbacho y Abril

José María Corbacho y Abril, el poeta de la libertad, fundió versos con la lucha por la independencia del Perú. Forjado en las montañas de Arequipa, su pluma se convirtió en espada, defendiendo la justicia y la dignidad. Su legado brilla como una estrella en el firmamento de la historia.

Carlos Concha Boy

Carlos Concha Boy, poeta chalaco, desplegó su alma en versos desde temprana edad bajo el amparo de Dora Mayer. Su breve pero luminosa vida, truncada por la enfermedad a los 19 años, dejó un legado de sueños plasmados en «Anhelos de Redención». Su poesía trasciende, como una flor que brota en el puerto y se eleva al firmamento literario.

Luis Fernán Cisneros

Luis Fernán Cisneros, poeta y defensor de la verdad, desafió con su pluma las sombras de la dictadura en el Perú del siglo XX. Su vida fue un canto a la libertad y un tributo a la valentía, dejando un legado de poesía y compromiso que trasciende fronteras y tiempos.

Alfonso Cisneros Cox

Alfonso Cisneros Cox, nacido en la efervescente Lima en 1953 y ascendido al firmamento literario en 2011, fue más que un poeta: un susurro de haikus en el viento, un maestro del verso que teje la esencia de la naturaleza en palabras. Su legado es un eco eterno en la sinfonía de la poesía hispanoamericana.

Eduardo Chirinos

Eduardo Chirinos (1960-2016), alma inquieta entre versos, fue un poeta peruano cuya pluma danzó en la lírica de la Generación del 80. Desde la bruma de Lima hasta los horizontes de Estados Unidos, sus palabras tejieron paisajes de emociones, trascendiendo la muerte para habitar eternamente en el corazón de la poesía.

Sandro Chiri

Alberto Sandro Chiri Jaime, voz luminosa de la poesía peruana, nació entre las olas del Callao en 1958. Tejedor de versos, explorador de la esencia humana, su pluma es un eco que resuena en las aulas y en las páginas de revistas literarias. Su trayectoria es un viaje entre letras y emociones.

Nazario Chávez Aliaga

Nazario Chávez Aliaga, maestro de letras y voz de la tierra peruana, se erigió como poeta y líder en los turbulentos vientos del siglo XX. Desde las aulas hasta los pasillos del poder, su pluma y su alma vibraron al compás de la lucha por justicia y progreso.

Oswaldo Chanove

Oswaldo Chanove Zavala, nacido en la cuna poética de Arequipa en 1953, es un enigma literario que fusiona el palpitar urbano con la esencia andina. Con una pluma que teje sueños en cada verso, sus obras resuenan con la magia de lo cotidiano y la profundidad del alma humana.

Jorge Castillo Fan

Jorge Castillo Fan, poeta nacido en Piura, Perú, en 1967, es una voz imprescindible de la Generación del Noventa. Su obra, impregnada de pasión y misterio, refleja la melodía del alma humana y la danza eterna entre la luz y la sombra.

Francisco Carrillo Espejo

Francisco Carrillo Espejo, alma luminosa nacida en Lima en 1925, fue mucho más que un poeta; fue un eterno buscador de la belleza y la verdad en las palabras. Su pluma, imbuida de la esencia de su tierra peruana, trazó versos que aún resuenan en el corazón de quienes buscan el eco de la poesía.

Germán Carnero Roqué

Germán Carnero Roqué, poeta peruano, lleva en su alma la esencia iberoamericana. Exiliado, su vida es un viaje sin fronteras, un canto a la diversidad. Voz poética de la generación del 60, irrumpió con «Ese cantar de alondra». Periodista, diplomático y trotamundos, ha sembrado su talento en letras, escenarios y organismos internacionales.

Carlos Hugo Garrido Chalén

Carlos Hugo Garrido Chalén, luminaria literaria nacida en la cálida tierra de Tumbes, Perú, teje versos que danzan entre la luz y la sombra. Reconocido como Patrimonio Cultural Vivo de la Nación, su obra trasciende fronteras, abrazando la esencia misma de la existencia humana.

Enrique Bustamante y Ballivián

Enrique Bustamante y Ballivián, alma errante entre versos, nació el 20 de noviembre de 1883 en Lima, Perú. Poeta de la sensibilidad modernista, su pluma navegó por los mares del periodismo y la diplomacia, dejando en cada puerto el eco eterno de su poesía.