Poetas

Poesía de México

Poemas de Germán List Arzubide

Germán List Arzubide (Puebla de Zaragoza, Puebla, 31 de mayo de 1898 – Ciudad de México, 17 de octubre de 1998) fue un poeta y revolucionario mexicano. Perteneció al movimiento artístico llamado Estridentismo.

Nació en Puebla, Puebla, el 31 de mayo de 1898; muere en la Ciudad de México el 17 de octubre de 1998. Poeta, narrador, ensayista y dramaturgo. Estudió en la Escuela Normal de Puebla. Fue profesor en escuelas preparatorias, en la Normal y en la Universidad Obrera. Fundó Vincit, Ser y Horizonte; miembro de los consejos de redacción de Ruta y Tiempo; creador del teatro infantil de la SEP para el que escribió dramatizaciones históricas con su hermano Armando List Arzubide; tuvo a su cargo la oficina de Extensión de la Universidad Nacional. Perteneció al grupo literario Noviembre, a la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios; miembro fundador de la Academia Mexicana de la Educación y presidente de la Federación Mexicana de Escritores. Junto con Manuel Maples Arce promovió el Movimiento Estridentista. Acompañó a Venustiano Carranza a Aljibes, donde cayó prisionero. Trabajó con Vicente Lombardo Toledano y combatió la sublevación huertista.

Su militancia política de izquierda fue reconocida internacionalmente. Formó el Ala Izquierda de Empleados Federales cuando trabajó en la Secretaría de Hacienda, antecedente de los Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado. Colaboró en Excélsior, La Opinión, Siempre! y Tiempo. Miembro del SNCA como creador emérito. Medalla Lenin 1960 de la Unión Soviética. Premio Nacional de Periodismo Cultural 1983. Medalla de Oro Sandino 1985 del Gobierno de Nicaragua. Premio Puebla 1986. Premio Rosete Aranda 1994. Premio Nacional de Lingüística y Literatura 1997. Medalla Bellas Artes 1997. Premio Nacional de Ciencias y Artes en el rubro de Letras en 1997. Doctor Honoris Causa por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (post mortem).

EL VIAJERO EN EL VÉRTICE

tus adioses

solo rigen

en el eclipse de los panoramas
nos hundiremos en las riberas
de la perspectiva

y nadie
hojeará mañana
nuestro nombre

está en la vía
nuestro único destino
Y DETRÁS
se ahoga en la violencia
el suelto itinerario
del amor

la ciudad

falsificada

por el amanecer de su pañuelo
se derramó en la noche mecánica

del túnel

desdoblé el diario de mi indiferencia
y leí la catástrofe
de
su nombre

 

Artículo lo.

hay que tocar el piano
en la balsa de los andenes.

Mientras las locomotoras bufan su impaciencia
las arañas tejen
sus telas con hilos de música
para apresar la mariposa eléctrica.

La mecedora
sube por los peldaños de las notas
y un pájaro se deshila
en una overtura fascista
me perdí en la noche lamida de sus medias.
¡Cómo pesa este techo!
Allá fuera una rosa está pidiendo auxilio
y pensar que los postes se mueren de fastidio.

Einstein no ha descubierto
quién inventó las moscas.

Era tan jugosa
de imposibles su boca.

Al fin sus manos se hicieron pedazos.
Pero a pesar de todo
un grillo da su conferencia
interceptando
el mensaje
crispado
de las estrellas.

 

Así, surgen las

Ciudades que inaugura mi paso
mientras los ojos de ella
secuestran el paisaje /…/
los hilos del telégrafo
van colando la noche

y en las últimas cartas regresó la distancia
y con la boca abierta
el crepúsculo espera
que se resbale la primera estrella /…/

El balcón
de su adiós
se entrega entero en una conversión
en las esquinas
las muchachas inéditas
han encendido los voltaicos
y el paisaje metido en los eléctricos
va diciendo los nombres retrasados

Un vals en el exilio
remendado de notas de colegio
Y
cruzado de brazos
el HOTEL
lacrado con el grito de todos los países
y un pobre tiempo viejo
Esta ciudad es mía
y mañana
la arrojaré a puñados
al camino de hierro