Poetas

Poesía de Francia

Poemas de Paul Fort

Paul Fort (1 de febrero de 1872 – 20 de abril de 1960) fue un poeta francés. Nació en Reims, en el departamento de Marne, en Francia. Se convirtió en una figura importante de la comunidad artística de Montparnasse. Para 1912 sus logros e influencias sobre otros eran tales que Paul Valéry le apodó «El Príncipe de los Poetas». Paul Fort fue fundador de «Vers et Prose» en colaboración con Guillaume Apollinaire. Uno de sus trabajos más famosos es «La Ronde». Este poema es famoso en todo el mundo, ya que se trata de una petición por la amistad de todo el mundo. Murió el 20 de abril de 1960 en Francia. Se le enterró en el Cimetière de Montlhéry, en el département de Montlhéry, Essonne de Île-de-France, en la región de Francia.

Paul Fort fue retratado por Daniel Vázquez Díaz; también le retrataría Ignacio Zuloaga, ya que Fort frecuentaba a los españoles de París. Sin pretensiones intelectuales, pero siempre aspirante a la Academia Francesa, vivió bastante pobremente (había sido hasta florista, oficio nada contradictorio con el de poeta, por cierto), con su eterno sobado sombrero estilo Rembrandt que llevaba encasquetado hasta en su casa. Parece que rimaba como respiraba, sencillo y prolífico, y así escribió las «Ballades françaises», recogidas nada menos que en cuarenta volúmenes.

CANCIÓN DEL ALBA

¿Qué fue de mi pena? No tengo más pena.
¿Qué fue de mi amiga? No me importa de ella.

Por la dulce playa, a la hora serena del alba
inocente, ¡oh mar en distancia!

¿Qué fué de mi pena? No tengo más pena.
¿Qué fué de mi amiga? No me importa de ella.

Tus olas de encaje, la brisa marina,
tus olas de encaje por mis dedos blancos.

¿Qué fue de mi amiga? No tengo más pena.
¿Qué fué de mi pena? No me importa de ella.

Por un cielo nácar, mis ojos siguieron
la gris gaviota, luciente al rocío.

No tengo más pena ¿Qué fué de mi amiga?
¿Qué fué de mi pena? Ya no tengo amiga

¡Oh mar en distancia – al alba inocente!
murmullo tan solo, al borde del sol.

¿Qué fue de mi pena? No tengo más pena.
Es solo un murmullo al borde del sol.

LA ZAGALA MUERTA EN SUS AMORES

Esta zagala murió, murió en medio a sus amores
A enterrar se la llevaron, a punto de amanecer
La acostaron, solitaria, solitaria en su ataúd
Y regresaron alegres, muy alegres, ya de día.
Y cantaban bien alegres: «Nuestro turno ha de llegar»
«Esta zagala murió, murió en medio a sus amores»
Cantaban volviendo al campo, al campo como otros días.

NUESTRA CABANA EN YVELINE

Cabaña, tus adornos son margaritas, rosas:
a tu pie sus blancuras, sobre tí sus colores
Naturaleza hace bastante bien las cosas,
ata los corazones dentro un ramo de flores que,
dura solamente cuanto nuestros amores.

LA DICHA

En el prado quieta está. Corre pronto. Ve ligero
En el prado quieta está. Corre pronto. Que se va,

Si la quieres alcanzar. Corre pronto. Ve ligero
Si la quieres alcanzar. Corre pronto. Que se va.

Ya se acerca al cicutal. Corre pronto. Ve ligero
Ya se acerca al cicutal. Corre pronto. Que se va.

En la frente va a parar. Corre pronto. Ve ligero.
Del carnero va a parar. Corre pronto. Que se va.