Suecia

¡Abre la puerta, Rickard!

Stig Dagerman

Abre la puerta. Dicen que abra la puerta, y yo no la abro. No solo dicen que la abra, ruegan; y cuando los ruegos no surten efecto, amenazan, pero cuando las amenazas no surten efecto se callan un rato, susurran jadeantes y ansiosos mientras están totalmente quietos al otro lado de la puerta como si quisieran hipnotizarla...

El disparo de Cronos

Carlos Duarte

"Descendí del auto en una desolada calleja suburbana y caminé varias cuadras bajo la pertinaz llovizna ácida. Era el tercer taxi consecutivo que tomaba por si esos buitres del Consejo me habían puesto alguna cola. Pero no, estaban demasiado confiados como para molestarse en algo así. Creían tener todo bajo control pero les iba a preparar una pequeña sorpresa de despedida..."

Aguanieve

Stig Dagerman

"Entonces Sigrid mira al abuelo con la boca abierta, por ver si se acalora y empieza a gritar de nuevo. También lo mira madre. Pero esta vez no hay ningún peligro. El abuelo sigue deshojando zanahorias en la segadora."
Buzón de correo

Una tragedia menor

Stig Dagerman

Todas las grandes tragedias han ocurrido ya, hace mucho tiempo. Podemos leerlas en libros o verlas en el teatro. En nuestros días solo acontecen tragedias menores, tales como que la gente tiene hijos sin poder permitirse el lujo de casarse...
Suecia de noche. Foto por Micael Widell en Unsplash

Los juegos de la noche

Stig Dagerman

A veces, por la noche, cuando la madre llora en el cuarto y sólo pasos desconocidos resuenan en las escaleras, Ake tiene un juego que juega en vez de llorar. Finge ser invisible y poder transportarse adonde quiere, nada más que pensándolo. Aquella noche no había más que un sitio adonde pudiera anhelar dirigirse y en donde Ake está a menudo. Ignora cómo ha llegado allí, sabe solamente que está en una sala...
Belleville. Foto por Heather M. Edwards en Unsplash

Invierno en Belleville

Stig Dagerman

Si París es una forma de vivir, Belleville es una forma ardua de vivir. Y en invierno una forma de sufrir. De todos los inviernos el invierno que mejor recuerdo es el invierno en que se llevaron el motor de la máquina de coser de Régine y luego se lo devolvieron. A mí me quitaron el gorro pero no me lo devolvieron. Fue un largo invierno...
Strandvägen. Foto por Fredrik Öhlander en Unsplash

Érase una vez un mayo…

Stig Dagerman

Pronto iba a ser la una y todos los que estaban esperando empezaban a sudar y a enrojecer. Los que estaban delante eran empujados hacia la calzada por los que estaban detrás y había unas aperturas insoportables, incluso para los que tenían los codos bien afilados...
Invierno en Suecia. Foto por Noukka Signe en Unsplash

El frío de la noche de verano es fuerte

Stig Dagerman

"Un muchacho y una habitación. La habitación es calurosa y pequeña y tiene una ventana estrecha hacia la vida. Por la ventana el muchacho ve el cielo como una estrecha franja entre casas altas y sus párpados. Es joven e impaciente y cree que los párpados le impiden ver..."
La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina, una novela de Stieg Larsson

La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina

Stieg Larsson

Lisbeth Salander se ha tomado un tiempo: necesita apartarse del foco de atención y salir de Estocolmo. Trata de seguir una férrea disciplina y no contestar a las llamadas ni a los mensajes de Mikael, que no entiende por qué ha desaparecido de su vida sin dar ningún tipo de explicación. Lisbeth se cura las heridas de amor en soledad, aunque intente distraer el desencanto mediante el estudio de las matemáticas y con ciertos placeres en una playa del Caribe. ¿Y Mikael? El gran héroe vive buenos momentos en Millennium, con las finanzas de la revista saneadas y el reconocimiento profesional por parte de los colegas. Ahora tiene entre manos un reportaje apasionante sobre el tráfico y la prostitución de mujeres procedentes del Este que le ha propuesto Dag Svensson, periodista de investigación, y su mujer, la criminóloga e investigadora de género Mia Bergman. Las vidas de los dos protagonistas parecen haberse separado por completo, pero entretanto... una muchacha, atada a una cama, soporta un día tras otro las horribles…

El libro rojo

Carl Gustav Jung

«Los años en los que seguí a mis imágenes internas fueron la época más importante de mi vida y en la que se decidió todo lo esencial. Comenzó en aquel entonces y los detalles posteriores fueron sólo agregados y aclaraciones. Toda mi actividad posterior consistió en elaborar lo que había irrumpido en aquellos años desde lo inconsciente y que en un primer momento me desbordó. Era la materia originaria para una obra de vida. Todo lo que vino posteriormente fue la mera clasificación externa, la elaboración científica, su integración en la vida. Pero el comienzo numinoso, que todo lo contenía ya estaba allí». —C. G. Jung (1957)

Los hombres que no amaban a las mujeres

Stieg Larsson

Los hombres que no amaban a las mujeres es el primer libro de la trilogía Millennium, escrita por el periodista sueco Stieg Larsson. La novela combina el género policial, el thriller y la crítica social, y narra la investigación conjunta de un periodista y una hacker para resolver el misterio de la desaparición de una joven hace cuarenta años. El libro se centra en los personajes de Mikael Blomkvist, un periodista de investigación que es contratado por el magnate Henrik Vanger para escribir la historia de su familia y, de paso, averiguar qué pasó con su sobrina Harriet, que desapareció sin dejar rastro en 1966. Blomkvist acepta el encargo a cambio de una información que podría limpiar su nombre, ya que ha sido condenado por difamación contra otro empresario corrupto. La otra protagonista es Lisbeth Salander, una hacker antisocial y experta en informática que trabaja para una empresa de seguridad. Salander tiene un pasado traumático y una personalidad compleja, y se ve involucrada en el caso cuando Blomkvist la contrata…

Bob Dylan no acudirá a recoger el Nobel de Literatura

Isliada Editores

Tras dos semanas de incertidumbre ocasionadas por la aceptación o no del Nobel de Literatura de este año, finalmente, Bob Dylan aceptó el premio, sin embargo el músico no viajará a Estocolmo, Suecia, para recoger el galardón, que se entregará 10 de diciembre próximo. «Él desearía poder recoger el premio en persona, pero otros compromisos […]