Cuentos de Aventuras

Alain el Gentil: Soldado

Marcel Schwob

Sirvió al rey Carlos VII desde la edad de doce años, como arquero, después de que gente de guerra se lo llevara consigo del llano país de Normandía. Y se lo llevaron de esta manera...

Aloha Oe

Jack London

"Hawai goza de un clima sazonador, y Dorotea Sambrooke había sido expuesta a sus influencias en excepcionales y propicias circunstancias. Un mes antes era una niña delicada, delgadita, pálida; sus azules ojos parecían fatigados a fuerza de posarse sobre las áridas páginas de los libros, y diríase que en su mirada turbia y apagada fulgía una añoranza misteriosa por comprender el significado de la vida..."

Al final del arco iris

Jack London

Lee el emocionante relato de Montana Kid, un forajido estadounidense que llega a Alaska durante la fiebre del oro y se ve envuelto en una serie de peripecias y conflictos con los nativos y los buscadores de oro. Disfruta del contraste entre la cultura occidental y la indígena, así como del humor y la ironía de Jack London al retratar las costumbres y los valores de los personajes. Al final del arco iris es un cuento breve que te hará vivir una aventura inolvidable en el lejano norte.

El hombre que pudo ser rey

Rudyard Kipling

"Todo empezó a bordo de un tren que partió de Ajmir camino de Mhow. Se había producido un déficit presupuestario que me exigía viajar, no ya en segunda clase, que es la mitad de buena que la primera, sino en clase intermedia, que es en verdad pésima"

El desierto

Horacio Quiroga

"Hasta lo alto de la barranca, que los tres viajeros treparon bajo la lluvia, por fin uniforme y maciza, la arcilla empapada fosforesció. Pero luego las tinieblas los aislaron de nuevo; y entre ellas, la búsqueda del sulky que habían dejado caído sobre las varas."

A puñetazos

Jack London

"En ese instante la borrasca estalló sobre ellos. El capitán Dettmar se apresuró a popa, sacó de los pasadores las drizas de la mayor adujadas y las lanzó a la cubierta, dispuesto a salir corriendo. Los tres nativos surgieron en masa del pequeño castillo de proa, dos de ellos corrieron hacia las drizas mientras el tercero cerraba el tambucho de la sala de máquinas y daba la vuelta a los ventiladores."

La quimera del oro

Jack London

Los cuentos que recoge este volumen tienen casi todos como factor común la fiebre de los buscadores de oro en Alaska durante la segunda mitad del siglo XIX. El oro enriqueció a algunos y destruyó a muchos, convirtiéndose así en una auténtica "quimera". Historias duras, trágicas o solidarias, todas tienen como escenario estas heladas tierras. Porque la verdadera protagonista es la inmisericorde naturaleza helada, ese impresionante silencio blanco, preludio de la muerte. Frente al implacable frío polar, la lucha del hombre por la supervivencia en un medio hostil; protagonizada por seres generosos ("El silencio blanco", "La ley de la vida"), estafadores ("Demasiado oro"), inútiles y degradados ("En un país lejano"), avariciosos ("El hombre de la cicatriz"), o por la astucia ("El burlado") o la obstinación angustiosa y rabiosa de sus protagonistas ("Las mil docenas", "El amor a la vida", "La hoguera", "El diablo").

El diente de ballena

Jack London

En los primeros días de las islas Fidji, John Starhurst entró en la casa-misión del pueblecito de Rewa y anunció su propósito de propagar las enseñanzas de la Biblia a través de todo el archipiélago de Viti Levu. Viti Levu quiere decir «País grande», y es la mayor de todas las islas del archipiélago...
Río Yukón. Foto por Kalen Emsley en Unsplash

El burlado

Jack London

Aquél era el final. Subienkow había recorrido un largo camino de amargura y horrores, guiado, como una paloma, por el instinto que lo llevaba hacia las capitales de Europa, y allí, en el punto más lejano, en la América rusa, el sendero acababa. Estaba sentado en la nieve con los brazos atados a la espalda, esperando la tortura...
Un drama en los aires - Julio Verne

Un drama en los aires

Julio Verne

En el mes de septiembre de 185…, llegué a Francfort. Mi paso por las principales ciudades de Alemania se había distinguido esplendorosamente por varias ascensiones aerostáticas; pero hasta aquel día ningún habitante de la confederación me había acompañado en mi barquilla, y las hermosas experiencias hechas en París por los señores Green, Eugene Godard y Poitevin no habían logrado decidir todavía a los serios alemanes a ensayar las rutas aéreas...
Balde. Foto por Samur Isma en Unsplash

El balde

Horacio Quiroga

-¡Señora! -gritó la sirvienta sofocada aún por la rápida ascensión-: son del depósito de abajo. Están enojadísimos con los niños… han querido quemar todo...
Un drama en México, por Jules Férat

Un drama en México

Julio Verne

El 18 de octubre de 1824, el Asia, bajel español de alto bordo, y la Constancia, brick de ocho cañones, partían de Guaján, una de las islas Marianas. Durante los seis meses transcurridos desde su salida de España, sus tripulaciones, mal alimentadas, mal pagadas, agotadas de fatiga, agitaban sordamente propósitos de rebelión...
Alambre de púa. Foto por Spring Fed Images en Unsplash

El alambre de púa

Horacio Quiroga

Durante quince días el alazán había buscado en vano la senda por donde su compañero se escapaba del potrero. El formidable cerco, de capuera -desmonte que ha rebrotado inextricable- no permitía paso ni aún a la cabeza del caballo. Evidentemente, no era por allí por donde el malacara pasaba...
Parque Nacional y Reserva de Kluane de Canadá. Foto por Kalen Emsley en Unsplash

Amor a la vida

Jack London

Los dos hombres descendían el repecho de la ribera del río cojeando penosamente, y en una ocasión el que iba a la cabeza se tambaleó sobre las abruptas rocas. Estaban débiles y fatigados y en su rostro se leía la paciencia que nace de una larga serie de penalidades...
Lake District National Park, Foto por Click and Learn Photography en Unsplash

El Silencio Blanco

Jack London

—Carmen no durará más de un par de días. Mason escupió un trozo de hielo y recorrió compasivamente con la vista el cuerpo del pobre animal. Luego se llevó una pata del perro a la boca y comenzó a arrancar con los dientes el hielo que se apiñaba cruelmente entre los dedos...
Bear on cliff, por Harry Bullock Webster

Caras peladas

Jack London

"“En lo alto del Yukón hay otra variedad, con las patas simétricas. Se la llama el “oso pardo de cara pelada”, y es tan grande como malo. Únicamente el insensato hombre blanco piensa en cazarlo. Los indios tienen demasiado buen sentido. Solo una cosa hay que decir acerca del oso de cara pelada: que jamás se vuelve ante ningún mortal..."

Encender una hoguera

Jack London

Acababa de amanecer un día gris y frío, enormemente gris y frío, cuando el hombre abandonó la ruta principal del Yukón y trepó el alto terraplén por donde un sendero apenas visible y escasamente transitado se abría hacia el este entre bosques de gruesos abetos...

La serpiente de cascabel

Horacio Quiroga

La serpiente de cascabel es un animal bastante tonto y ciego. Ve apenas, y a muy corta distancia. Es pesada, somnolienta, sin iniciativa alguna para el ataque; de modo que nada más fácil que evitar sus mordeduras, a pesar del terrible veneno que la asiste...