Literatura Mexicana

La cena y otras historias

Alfonso Reyes

Este libro es una antología que reúne la mayor parte de la obra de ficción de Alfonso Reyes quien imaginaba hermosas e inquietantes historias —situadas en una dimensión que inventó en su juventud— y sabía contarlas de tal manera que producen en el lector un deslumbramiento como el que tan bien expresó Julio Torri: «Tu “Juan Peña” es precioso. ¡Cómo sabes sacar partido de cualquier cosa y hacerla interesante y bella! Estás maduro para las Memorias. Si te resuelves a escribirlas no seas del todo veraz; no prescindas de tu imaginación…»

Los voladores

J. Daniel Abrego

Una moneda, dos, tres o cuatro. Que más da. Ni todas las riquezas del mundo se comparan con la sensación de estar allá arriba y sentir que eres capaz de todo…

El dios de la lluvia llora sobre Méjico

László Passuth

La conquista de México constituyó sin duda una de las mayores gestas acontecidas en la historia de la España Imperial. Hernán Cortés y su ejército de quinientos soldados consiguieron para su rey y su religión el más importante de los imperios del Nuevo Mundo: el Azteca. En esta obra, convertida ya en todo un clásico dentro de la novela histórica contemporánea, Passuth combina hábilmente las crónicas contemporáneas, los datos arqueológicos y su amplio conocimiento del escenario histórico para recrear de forma magistral una de las etapas más fascinantes de la historia del Nuevo Mundo y reflexionar sobre el impacto que supuso para españoles y mexicanos el choque de dos culturas contrapuestas. «Destaca en la novela el soberbio relato que hace el autor de La Noche Triste, la retirada de Cortés y sus tropas de México, cuando sucumbió una gran parte de los españoles; perdieron la artillería, muchos caballos y casi todo el oro que habían atesorado.» Francisco Luis del Pino.

La literatura que tenemos… el periodismo que nos falta

Leopoldo Luis

Miércoles, 26 de septiembre de 2012. Tomen nota de la fecha, porque esa tarde me ocurrió algo totalmente inusual. Imaginé que una revista cubana, de cuyo nombre no quiero acordarme, me pedía un reportaje sobre la literatura mexicana contemporánea