octubre de 2022

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Una novela que duele

Yonnier Torres

Si meses atrás alguien me hubiera pedido que leyera una novela contextualizada en la Cuba de los 90, con sus conocidos fenómenos sociales (o íconos culturales, todo depende del punto de vista o el objetivo con el cual se revisite la historia) como la jinetera, el yuma, los fulas, los chícharos, el desasosiego, los balseros o el rigor radical de la crisis económica, me hubiera negado por completo.

A propósito de un olor

Adolfo Bioy Casares

En la noche del jueves el profesor Roberto Ravenna suspiró varias veces, pero a la una de la madrugada lanzó un quejido. Después de leer el último trabajo había encontrado, en la maraña de su mesa, una pila con otros diez...

El cuaderno prohibido

Alba de Céspedes

Valeria Cossati es prisionera de las convenciones sociales de la Italia de los años cincuenta y vive sofocada, casi sin darse cuenta, entre sus roles de esposa y madre. Presa de un impulso inexplicable, compra un pequeño cuaderno negro en el que anota sus reflexiones y en el que comienza a revelarse lo insatisfactorio de su vida burguesa: en ese espacio prohibido que le proporciona la escritura afloran los conflictos subterráneos de su existencia, las aspiraciones frustradas y los resentimientos ocultos, hasta desembocar en un acto íntimo que conmocionará al lector. Publicada originalmente en 1952, El cuaderno prohibido sigue resultando sorprendente por su modernidad y relevancia. Es un retrato magistral, capaz de revelar la identidad fragmentada y cambiante del ser humano, además de un gran testimonio histórico de la época, al reflejar tanto la crisis de los valores sociales e individuales como las encrucijadas a las que se enfrentaban las mujeres, en un homenaje a una generación pre-feminista que fue decisiva para las revoluciones posteriores. Alba de Céspedes, «un redescubrimiento…

Fuga de capital

Yunieski Betancourt

Gilberto mira el reloj. Ha pasado casi una hora desde que le inyectó la droga al “paciente”. Según sus cálculos, en cualquier momento debe despertar con la percepción temporal interrumpida, requisito indispensable para efectuar la transferencia de conciencia...

Vieja moralidad

Carlos Fuentes

—¡Zopilotes negros! ¡Cuervos devoradores! ¡Fuera de mi vista! ¿Quieren que las plantas se sequen? ¡Tomen el otro camino, el que da la vuelta por la casa de doña Casilda, que al fin esa vieja beata se hincará cuando pasen!...

Rouletabille en el palacio del zar

Gastón Leroux

En la última página de El perfume de la Dama de negro supimos que el zar reclamaba a Rouletabille para solucionar un caso enrevesado, mientras el Comité revolucionario le amenazaba con no dejarle llegar vivo a San Petersburgo si aceptaba la oferta. Aquella misma noche Rouletabille tomó el tren. También Leroux, su creador, había estado como periodista en San Petersburgo, escenario de su novela. En medio de una red de envenenadores y asesinos invisibles, donde no faltan secuestros, suplantaciones, bombas vivientes y juicios sumarísimos, brilla la prodigiosa mente de Rouletabille, en uno de esos juegos de lógica que sólo pueden resolverse como un enigma o un jeroglífico.

Diálogo con Pedro Juan Gutiérrez

Cita en la azotea del Rey de La Habana (I)

Rafael Grillo

Hará una década conocí a un Pedro Juan Gutiérrez (PJG en lo adelante) que fumaba tabaco y bajaba ron como un albañil. Fue en la Casa Taller del pintor Antonio Canet, en Regla. Ese sí se parecía al otro Pedro Juan, el personaje de la Trilogía sucia de La Habana

La chica del cumpleaños

Haruki Murakami

El día de su vigésimo cumpleaños también trabajó de camarera, como de costumbre. Le tocaba todos los viernes, pero, de hecho, aquel viernes por la noche no debería haber trabajado. Había intercambiado su turno con otra chica que también trabajaba por horas...

Plexus

Henry Miller

Volumen central de la trilogía que forma con Sexus y Nexus, esta novela recrea mediante flash backs la infancia del genial escritor, y desde el presente narrativo, su abandono contra viento y marea de toda otra ocupación que no sea la escritura, librándose para ello de cualquier atadura con las convenciones, las rutinas o los supuestos deberes. Atrapado en un empleo insatisfactorio que finalmente decide abandonar, su lucha denodada por conseguir publicar su obra se convierte en una obsesión, que las dificultades de todo tipo (económicas, afectivas, sexuales) van contrapunteando con notas a veces humorísticas. El espacio que se concede a la reflexión sobre literatura, sobre el funcionamiento de la sociedad capitalista y sobre el componente espiritual del hombre acrecientan el interés de una novela intensa y de un ritmo arrebatador.