María de Zayas y Sotomayor

María de Zayas y Sotomayor. Una figura destacada del Siglo de Oro español, nació en Madrid el 12 de septiembre de 1590 y su legado literario trasciende hasta después de 1647. Su obra, junto con la de otras destacadas escritoras como Ana Caro de Mallén y sor Juana Inés de la Cruz, la posiciona como una de las grandes de la literatura del siglo XVII en España. Reconocida como una precursora del feminismo en la península ibérica, su vida estuvo marcada por una baja nobleza y continuos traslados debido al servicio de su padre, capitán de infantería.

Poco se sabe de su vida personal, aunque se especula sobre su residencia en Madrid y otras ciudades como Zaragoza, Sevilla, Granada o Barcelona, debido a la publicación de sus obras en diferentes lugares. Se ha sugerido incluso un posible encuentro con la famosa Madame de Sévigné a través de las traducciones y copias de sus novelas. A pesar de la incertidumbre sobre su biografía, su influencia como escritora y su activismo feminista son innegables.

Su obra más destacada, "Novelas amorosas y ejemplares" (1637), presenta diez relatos cortos que exploran los estratos sociales superiores de la época, con una narrativa que combina la amenidad narrativa con una profunda reflexión sobre la condición humana. Inspirada en el Decamerón de Giovanni Boccaccio, Zayas adopta una estructura narrativa similar, pero añade su propia voz y estilo, destacando por su denuncia social y la descripción psicológica de sus personajes.

En su segunda serie de novelas, titulada "Novelas y saraos" (1647) y posteriormente reeditada como "Desengaños amorosos" (1649), María de Zayas profundiza en temas más oscuros y escabrosos, convirtiéndose así en pionera de la literatura de terror española. Su prosa, libre de elementos morales convencionales, refleja una fuerte independencia y un orgullo femenino, y su enfoque en la pasión y la sexualidad femenina desafía las convenciones de la época.

Aunque su obra teatral y poética es menos conocida, María de Zayas también dejó huella en estos géneros, con una comedia titulada "La traición en la amistad" y algunas poesías que se conservan en diversas antologías. Su estilo literario rehúye los excesos retóricos del culteranismo, priorizando la claridad y la comprensión universal de sus obras.

A pesar de la polémica sobre su existencia y la especulación en torno a su vida, el legado literario de María de Zayas Sotomayor perdura como un testimonio poderoso de la lucha por la igualdad y la dignidad de las mujeres en la España del Siglo de Oro. Su voz, valiente y visionaria, sigue resonando en la actualidad como un faro de inspiración para las generaciones venideras.