Séneca

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Séneca

Séneca. Lucio Anneo Séneca, conocido como Séneca el Joven para distinguirlo de su padre, fue un filósofo, político, orador y escritor romano que destacó por sus obras de carácter moralista. Provenía de una familia distinguida, perteneciente a la más alta sociedad hispana en una época en que la provincia de Hispania estaba en pleno auge dentro del Imperio Romano.

Pensador, intelectual y orador, de tendencias moralistas, Séneca fue una figura predominante de la política romana durante la era imperial, siendo uno de los senadores más admirados, influyentes y respetados. Pasó a la historia como el máximo representante del estoicismo y moralismo romano tras la plena decadencia de la república romana.

Séneca fue Cuestor en Roma y pronto se ganó una gran fama como orador en el Senado de Roma, donde mantuvo una tensa relación con el emperador Calígula y con su sucesor Claudio, ya que estuvo a punto de ser ejecutado en dos ocasiones, siendo, finalmente, desterrado a Córcega.

No fue hasta ocho años después que fue perdonado, convirtiéndose en uno de los tutores de Nerón, con quien ejerció de consejero y ministro. De hecho, en los primeros años del gobierno de Nerón, Séneca fue uno de los rectores del Imperio hasta que el emperador decidió apartar a su viejo tutor con la ayuda de otros políticos.

Tras el asesinato de su principal valedora, Agripina, Séneca perdió gran parte de su poder en el senado y decidió apartarse de la vida pública. Se le implicó en varias conjuras contra Nerón hasta que volvió a ser condenado a muerte, pero antes que afrontar la ejecución, Séneca optó por el suicidio.

En lo literario, su obra filosófica se considera de gran influencia en siglos posteriores, sobre todo a finales de la Edad Media y a principios del Renacimiento, siendo citado tanto por humanistas como por teólogos, con especial atención a sus doctrinas morales y éticas, fundamentales para el estoicismo. Las obras que nos quedan de Séneca se pueden dividir en cuatro apartados: los diálogos morales, las cartas, las tragedias y los epigramas.

Además, durante el período de retiro de la vida política escribió un libro de Cuestiones naturales, dedicado a Lucilio, que trata de fenómenos naturales, y donde la ética se mezcla con la física.