Terror gótico

La madriguera del gusano blanco

Bram Stoker

«Hay un profundo misterio entre las líneas de esta obra -afirma el biógrafo de Bram Stoker, Harry Ludlam-, y es el misterio del espíritu del hombre que la escribió». Consumido por una enfermedad tenaz, y agravadas las dificultades financieras que siempre lo habían acosado y que ensombrecieron su vejez, Stoker publicó La madriguera del Gusano Blanco en 1911, a los 64 años. Sería su última novela. El celebrado autor de Drácula moriría en 1912, pocos días después del hundimiento del Titanic. El villano de esta peculiar novela iniciática, escrita al parecer bajo el influjo de las drogas, es una gigantesca y primitiva entidad serpentiforme, que vive en un hediondo pozo a mil pies de profundidad en el antiguo emplazamiento de un templo pagano con claras reminiscencias de Machen (yuxtaposición de supersticiones druidas, britanas, y romanas). Pero esta singular criatura primigenia, que espera pacientemente completar su ancestral tarea destructiva, adopta la forma humana de la sinuosa y bella Lady Arabella, capaz de devorar hombres y fortunas con idéntica frialdad. El tema…

La magia del monje, o el elixir de la vida

Alexander de Comeau

El más impenetrable misterio rodea la vida de Alexander de Comeau, autor del que tan sólo se sabe su nombre (tal vez seudónimo) y su nacionalidad británica. Las guías literarias de terror más especializadas —que reseñan otra obra de De Comeau, «Fire of Isis» (1927)— recomiendan con entusiasmo la lectura de «La magia del monje» (1931) como una novela memorable, de un gótico tardío, delirante y única. La historia que nos cuenta De Comeau en esta obra inclasificable posee sin embargo todas y cada una de las características del género gótico. Su protagonista, el hermano Dimas, es un religioso laico aficionado a la Alquimia, a quien el anciano y corrupto abad de su monasterio comisiona para encontrar el Elixir de la Vida Eterna. Dimas parte de viaje, en pleno otoño de la Edad Media, a la busca de los sabios ocultistas que, antes que él, aseguraron haber buscado el Elixir… e incluso haberlo encontrado. Viajará a la tierra de los muertos, se enfrentará con un embrutecido noble feudal, conseguirá amuletos…

Drácula

Bram Stoker

El conde Drácula pertenece a esa lista de personajes que, popularizados por el cine, han cobrado vida propia, haciendo oscurecer injustamente la obra literaria de donde proceden. Y, sin embargo, la novela de Bram Stoker sorprende por su solidez y arquitectura: la ausencia del erudito narrador decimonónico y la acumulación de materiales de primera mano confieren al relato una modernidad narrativa insólita en este tipo de obras. Al mismo tiempo, la lenta progresión en el desvelamiento del misterio, producto de la confrontación y convergencia de los diversos puntos de vista, crea una tensa atmósfera de suspense en medio de su aparente distanciamiento y frialdad.

El retrato de Dorian Gray

Oscar Wilde

Oscar Wilde solo publicó una novela, pero qué novela: El retrato de Dorian Gray. En esta novela hay dos aspectos importantes: el moral y el artístico. El primero ha sido, probablemente, la causa principal de su enorme popularidad. La novela fue publicada en 1890 provocando la reprobación de la crítica. Los ataques se basaron en la discutible moral de la obra. Acusaron al autor de haber escrito una historia destinada a corromper al público inglés. Dorian tiene una moraleja que consiste en que todo exceso trae consigo su castigo. El personaje, que ha llevado una vida de placeres, intenta matar el paso del tiempo y en ese intento se mata a sí mismo. Para el desarrollo dramático de esta historia, era preciso rodear a Dorian Gray de una atmósfera de corrupción moral. De otro modo, la historia no hubiera llamado la atención. El hecho de conservar vaga, indeterminada y maravillosa esta atmósfera, fue el propósito del artista que la escribió, porque los demás personajes ven en Dorian su propio pecado.…