Tute de reyes
Antonio Benítez Rojo
"Fue hace varios años, a mediados de diciembre, cuando conocí a Robledo. Iba a la bodega roja, a comprar unas nueces para el desayuno de Euclides, cuando noté que Villa Concha había sido ocupada: un automóvil se encontraba al otro lado de la reja enmohecida; en el balcón, rodeado de hiedras, un hombre corpulento y canoso destupía su cachimba con gestos distraídos."
Las puertas se abren a las tres
Guillermo Cabrera Infante
Arriba el sol era un hueco en el cielo por donde entraba el mediodía: el amarillo amarillo de los edificios pintados de amarillo y el blanco quemante de las aceras y el malva del asfalto y el negro de la pelambre de los gatos que dormían en los tejados y el azul de las niñas de los ojos de las niñas de azul...
El traidor
Reinaldo Arenas
"¿Qué sabe usted de él? Qué sabe nadie... Ahora que Fidel Castro se cayó, lo tumbaron o se cansó, todo el mundo habla, todo el mundo puede hablar. El sistema ha cambiado otra vez. Ah, ahora todo el mundo es héroe. Ahora todo el mundo resulta que estaba en contra..."
El orador constante
Manuel Quintero Pérez
Yo nací pa’ meter muela, como dice el vulgo. En eso de hablar y hablar, no hay mortal en esta tierra que me gane…
Cuentos
José Lezama Lima
En ocasión de la primera centuria del gran visitador del Prado, se presentaron estas cinco piezas que alguien podría considerar menores; pero que lo serán solo en extensión. Difieren de aquellas ideas cronométricas que sobre el relato breve emitió, por ejemplo el uruguayo Horacio Quiroga. Parametrado al estilo del tempestuoso y nunca bien enaltecido autor de Anaconda, un cuento resulta una prueba difícil para José Lezama Lima; una prueba que él más bien se apresuraría a ridiculizar. Está visto que no lo atraen los argumentos sintéticos ni las historias excluyentes.
La vuelta en redondo
Humberto Arenal
“…todo me llega tarde hasta la muerte, como si uno pudiera decidir lo que le gusta, esta gente que me rodea, ya es muy tarde, la muerte no será tan mala después de todo si lo que uno deja está tan podrido, siempre ahí callada cuando no está así me mira con sus ojos desconfiados y duros siempre igual, treinta años mira que tener que haberla aguantado treinta años a mi lado, antes siquiera…”
Y vos por qué lloras
Frank David Frías
A Yadia Mesas le habían dado una paliza y en cierto modo ella sabía que el final de la pelea sería como las últimas veces que subió al ring…
La Edad de Oro
José Martí
La Edad de Oro fue una revista mensual para los niños, del cubano José Martí. Mantiene su frescura, belleza y vigencia más de un siglo después, hablando a los niños en un lenguaje universal que no conoce tiempos ni distancias. La primera revista vio la luz en julio de 1889, durante la estancia de Martí en Nueva York para preparar la guerra que le daría la independencia a Cuba del colonialismo español, y en la que Martí perdería la vida. Realizando un esfuerzo sobrenatural entre tantas responsabilidades, Martí logró publicar 4 números de la revista.
Katharsis
Betsabeth Marian Zaldívar Aguilera
Mis mariposas, veintisiete en total, no tienen la culpa, desde luego. Las mariposas nunca tienen la culpa. Observo, sin dejar de sujetarla, a la mariposa de turno…
Bestial entre las flores
Reinaldo Arenas
"Cuando llegó Bestial, la casa se encogió de pronto como un perro cuando le van a dar un estacazo. Mi abuela, que se encontraba desyerbando los clavelones, lanzó un escupitajo amarillo y entró en la sala. Y mi madre salió rumbo al pozo a sacar agua..."
El milagro del ascensor
Alejo Carpentier
"Fray Domenico empujó una puerta. El olor a incienso y maderas polvorientas le hizo contraer la nariz con fruición. Arrojó su birrete de groom sobre una cama de soldado. Se despojó de su casaca guarnecida de ciento veinte botones de níquel..."
Un rato de tenmeallá
Guillermo Cabrera Infante
"y entonces el hombre dice que ellos dicen que le diga que no pueden esperar mas y entonces y entonces y entonces mama le dijo que eran unos esto y lo otro y que primero la sacaban a ella por delante y el hombre le dice que no la coja con el que no tiene que ver nada..."
Taita, diga usted cómo
Onelio Jorge Cardoso
"El pequeño la vió brillar un instante sobre el espeso campo verde. Ahora el padre venía voceando la yegua hasta el camino y el muchacho se hizo a un lado del portillo dejándole el paso libre a la bestia. Le vio sobre el lomo muy cerca de la cruz, dos heridas que le arrugaron la piel. Cuando el sol empezó a meterse detrás de la manigua Nando y el viejo encarrilaron el trillo."
Pequeño mundo perfecto
Argenis Osorio
La mujer la dejó hacer. La dejó hacer mucho tiempo. Virginia se sentó en el pie de la mujer. Estaba cómoda. Era feliz. Era la reina. Era la esclava. Era la perra. Era la puta. Era, por fin, la hembra mejor servida de la Isla…
Un fragmento de la novela publicada por Atmósfera Literaria, 2019…
La puerta roja
Johan Moya Ramis
Esta novela publicada por Atmósfera Literaria, 2019 narra las peripecias de Ezequiel, profesor de teología en La Habana, que se involucra en un "peligroso descenso al inframundo de los sentimientos y motivaciones del alma humana donde el sectarismo, el asesinato y el secuestro irán al ritmo trepidante de rock and roll"…
Tobías
Félix Pita Rodríguez
"Fue en la cochina cárcel de San Pedro Sula y allá por el año veintiséis, un año feo para mis huesos. De tumbo en tumbo, y como con los ojos cerrados, yo había ido dando traspiés y recibiendo patadas en el trasero. Ustedes no pueden saber. Una patada en el trasero siempre lo pone a un mal por dentro y con ganas de hacer daño. Pero el escozor pasa y se puede cargar a la cuenta de las injusticias de la vida."
Viñetas
Guillermo Cabrera Infante
"No estaba muerto, pero ya no sentía: no estaba muerto todavía. Unos hombres le arrastraban por los pies. Desde el segundo piso lo bajaron a la calle por las escaleras y su cabeza golpeaba contra cada escalón. En uno de los escalones dejó un trozo de piel cubierto de cabellos que eran rubios en la punta y muy negros hacia la raíz"
El hijo y la madre
Reinaldo Arenas
"El hijo y la madre estaban de frente. Sentados en dos sillones idénticos, junto a la ventana de cristales y persianas por donde se veían las hojas del almendro en la que los pájaros no cesaban de zambullirse. El sol brillaba sobre la madre y el hijo en forma de cenefa amarillenta."
Los amantes del ABECEDARIO
Rafael Grillo
En la noche de un Miércoles 16 de Abril, en la Habana del siglo XXI, un hombre y una mujer que se desconocen, desde sus lechos distantes…
El estudiante
Alejo Carpentier
"Trató de huir. Vio una ancha puerta, amparada por una inscripción en caracteres huecos: Trousseau. Aquella palabra tenía una tibia sugerencia de ajuar de novia. El estudiante penetró en un corredor oscuro, esperando admirar Malinas sedosas, evocadoras de las frescas carnes de doncellas, que se presentan sabiamente como los filetes caros que se envuelven con encajes de papel."