Poetas

Poesía de Chile

Poemas de Hernán Valdés

Hernán Valdés fue un escritor y poeta chileno que nació en Santiago de Chile en 1934 y falleció en Kassel, Alemania, en 2023. Es conocido especialmente por su libro Tejas Verdes, el primer testimonio publicado de la represión llevada a cabo por la dictadura militar encabezada por el general Augusto Pinochet.

Valdés comenzó su carrera literaria publicando poesía. Su primer libro, Poesía de salmos, apareció en 1954. Estudió cine en Praga entre 1963 y 1964 y luego se trasladó a París por un par de años. En 1970 regresó a Chile en barco junto con Pablo Neruda y trajo los originales de su segunda novela: Zoom, que se publicó en México en 1971, durante el gobierno de la Unidad Popular.

En Chile trabajó en el Centro de Estudios de la Realidad Nacional (CEREN) de la Pontificia Universidad Católica de Chile hasta el 11 de septiembre de 1973, día del golpe de Estado que derrocó al gobierno de Salvador Allende e inició la dictadura de Pinochet. Al día siguiente, agentes armados entraron en su departamento en busca de Miguel Enríquez, líder del MIR. Aunque Valdés declaró que no conocía a nadie del MIR, fue detenido e ingresado al campo de prisioneros Tejas Verdes en Llolleo, donde fue torturado.

Después de un mes en Tejas Verdes, fue liberado y pidió asilo en la embajada de Suecia. En mayo de 1974 llegó a Barcelona y a los pocos días comenzó a escribir lo que se convertiría en Tejas Verdes: diario de un campo de concentración en Chile, considerado uno de los primeros y mejores relatos sobre el horror de la dictadura militar. El libro se publicó el mismo año en España y solo se editó en Chile 22 años después, en 1996.

Valdés regresó a la ficción y escribió otras novelas: A partir del fin, centrada en el golpe militar de 1973, salió en México en 1981 y en Chile también 22 años después; La historia subyacente, publicada en alemán en 1984 y aparecida en español en Chile en 2007. Valdés se radicó en Kassel, Alemania, después de haber vivido mucho tiempo en España e Inglaterra.

Entre los premios que recibió Valdés se cuentan el Premio Municipal de Literatura de Santiago por Cuerpo creciente (1967) y el Premio Altazor de Ensayo por Fantasmas literarios (2006). Su obra se caracteriza por una prosa ágil y lúcida, un sentido crítico y una mirada comprometida con la realidad social y política de su país.

CÓMO TE ALIMENTAS

desde cuando me separé de mi mujer
y vivo solo
todas las noches
pongo un disco de Bach
y preparo amorosamente
mi comida
esto no me parece no
que sea triste
siempre tengo apetito
y un sublime talento
para cocinar
puedo hacer salsas rubias
guisos exóticos
de cada alimento conozco
el tiempo las correspondencias
pero al instante de sentarme a la mesa
solo
recuerdo que era grato
advertir la presencia de una mano
que venía hacia mí
y me ofrecía el vino la sal
y recuerdo también
qué dulce era
decir que todo estaba malo
y acostarme furioso
sin probar una miga

ORGANIZACIÓN

Cuando llegué
ustedes lo tenían todo organizado,
todo estaba en su lugar,
los bienes repartidos, las situaciones hechas,
los grandes amores consumados,
las ideas expresadas y puestas en práctica,
los pájaros volando regularmente
según rutas establecidas,
las máquinas,
las máquinas trabajando a la perfección,
yo no tenía nada que agregar,
incluso la posibilidad de destruir todo eso
estaba calculada,
ya se había visto antes,
todas las opciones estaban previstas
en vuestro programa.
Cuando llegué incluso
ustedes ya habían hecho la revolución,
ustedes ya habían muerto luchando por la injusticia,
por un mundo mejor para mí,
ustedes ya eran héroes
y las calles estaban llenas de vuestros nombres,
yo no tenía sino que aprenderlos de memoria
y venerarlos.

SOLIDARIDAD

Entonces descubrí que otros,
muchos otros
habían intentado cambiar el mundo
y que cada cual tenía
sus pequeñas fantasías al respecto
y rápidamente, vehementemente
asumí mi puesto en la revolución.
No tenía nada que perder
y no perdí más que el entusiasmo,
gradualmente, se entiende,
también perdí el respeto.

RUMBA

Para hacer un país
se necesita
una bandera
un himno nacional
un héroe patrio
un ejército de tierra y mar
un sillón presidencial
un baile criollo
un plato típico
templos y apropiados
coribantes
un poeta laureado
una prisión
y un par de súbditos

PARA LLEGAR AQUÍ

Para llegar aquí
debí pagar impuestos en siete puertas
y todavía me quedan por delante algunas
por pagar
cuyo monto ignoro.
Debí callar
lo que ocurría al otro lado
los gritos de terror.
Debí olvidar
quién era antes de llegar,
saludar a esos desconocidos
que ahora me sonríen
como si siempre hubiéramos mantenido
la más grande amistad.
Debí jurar fidelidad
a la constitución,
a la bandera,
a la memoria de héroes
hechos a la medida.
Y aquí me tienen
satisfecho de mí mismo,
de mi conducta ejemplar,
dispuesto a forjarme un destino
luminoso
a vuestro lado.

ROSA

Antes de ser rosa
la rosa fue una idea,
una combinación de sueños
de viajeros antiguos,
de ansias de tributos espléndidos
a las bienamadas,
un delirio perturbador de los sentidos,
un error en los cálculos de probabilidades,
entre color perfume geometría,
mas, rechazando cualquier intento de inventarla
según ideas preconcebidas,
la rosa se inventó a sí misma.

APARICIONES

todos los ilusionistas
los pobres magos el gran Merlin
Urbain Grandier
mis vecinos los Grimm
no podrían jamás
producir un espectáculo
tan insólito y deslumbrante
como tu aparición

Y DESAPARICIONES

mas las apariciones no saben permanecer
tan gratuitamente como vienen
se van
su destino es durar el tiempo de seducirnos
el tiempo de creer
en su permanencia
de enseñarnos a sentir
su sed
después de ese momento nada
la súplica la adoración
las retendrán
las apariciones traen consigo
el anuncio
de su desaparición